Entrevista. Aníbal Fernández. Senador nacional (FpV)
Reportaje de Eduardo Anguita. Miradas al Sur
El Senado de la Nación le dio media sanción, al proyecto de ley que declara de interés público la producción de hidrocarburos, plantea la recuperación de YPF por parte del Estado y declara sujetas a expropiación el 51% del total de las acciones. De esta manera, la Cámara Baja lo someterá a un plenario y dejará al proyecto en condiciones de obtener sanción definitiva en los primeros días de mayo. La aprobación también saldría con una contundente mayoría.
Quienes tenemos un concepto de vida nacional y popular, nunca soñamos con este proceso histórico. Y uno, si vale el término, hasta lo disfruta.” De esta forma, y en diálogo con el programa Hoy más que nunca, que se emite por Radio Nacional, el senador nacional por el Frente para la Victoria, Aníbal Fernández, se refirió a la decisión de la Presidenta de expropiar el 51% de las acciones de YPF.
Durante la charla, el ex jefe de Gabinete explicó que la nacionalización de la petrolera se “ajusta a derecho ciento por ciento” y que se “están tomando decisiones que son estratégicas para nuestro país”. Asimismo, resaltó el rol de Julio de Vido y Axel Kicillof en la intervención de YPF, y le dedicó unas palabras al apoyo de los bloques opositores: “Cuando esto sucede, uno siente que no está haciendo cosas traídas de los pelos”.
–Usted dice nacional y popular. Sin embargo, me da la impresión que en el Senado han logrado un arco político que tiene más integrantes nacionales y populares de los que uno cree.
–En algunos casos, la Historia se los lleva por delante. Por ejemplo, el radicalismo ha tenido una historia detrás de la lucha por la energía y puntualmente por el petróleo. Si bien no soy quién para meterme en la vida del partido y ellos sabrán lo que hacen, me costaba creer que no hubiera una responsabilidad histórica detrás de una decisión de estas características. Evidentemente, tan equivocado no estaba, porque el presidente de la UCR, Mario Barletta, ratificó que van a acompañar el voto del Poder Ejecutivo.
–Eso, como significación, ¿es importante o relativo? En todo caso, que el radicalismo y el socialismo apoyen, es un dato más, pero no es como para encandilarse.
–No encandila, pero le da lógica al criterio político. Cuando uno discute estas cosas pareciera que está muy lejos de la posibilidad de hablar en serio sobre políticas de Estado que nos comprendan a todos. Gracias a dios, estas cosas afloran. Lo que ha hecho Repsol es una demostración acabada de lo que significa una empresa de capital privado buscando la rentabilidad; es decir, mejorar su situación de bolsillo. Ellos se dedicaron a producir nafta Premium y JP1 para los aviones, mientras que el año pasado terminamos importando 9.297 millones de dólares en fueloil y en gasoil, que es lo que necesitamos para la producción industrial, agropecuaria y generación energética. Por último, lo que hemos apreciado es que se ha derrumbado la producción de crudo, de gas y las reservas, así como ha crecido el endeudamiento. En cambio, ellos no sólo han recuperado los 13.100 millones de dólares de inversión, sino que además se llevaron 9 mil millones de dólares de dividendos. Si las explicaciones no son claras, no sé qué es claro.
–¿El resto de las compañías petroleras han tenido una performance mejor que Repsol-YPF? Tengo un documento a la vista, supongo que desde la clandestinidad porque está firmado el 17 de abril, en el cual da la impresión de que YPF dice, “ojo, ¡atenti!, porque el resto de las compañías petroleras no está mejor que YPF”.
–Es posible. Pero nosotros tenemos que velar por los intereses de los argentinos. Ahora, si usted ve que esto está funcionando en otros términos, por más que me diga que la participación en el mercado es escasa, eso es tonto. Lo escuché en el debate cinco o seis veces, incluso de los técnicos que han venido. Nuestro objetivo es que, una vez que esté manejada por el Estado y encontremos el tan ansiado autoabastecimiento, pasemos a tener una parte del mercado lo suficientemente importante como para que los demás pongan las barbas en remojo. Nosotros tenemos la responsabilidad de seguir avanzando con ese tema.
–Lo veo muy afilado en temas energéticos. En términos de convicciones y de ejercicio de la administración, ¿cuánto necesita un equipo de gobierno para poder complementar un debate parlamentario que puede ser arduo?
–Hay que destacar que quienes hicieron de interventor y vice, Julio de Vido y Axel Kicillof, son dos personas avezadas y conocedoras de lo que estamos hablando. Ninguna de las dos se está encontrando con nada que le sea ajeno. Nosotros decíamos en la universidad que cuando había que sentarse para el parcial había que poner el culo en la silla. Aquí hay que hacerlo, no hay mucho que inventar, y en esto hay una fuerte colaboración por parte de los trabajadores que quieren ver a esa YPF más grande que nunca. Ya no existe más la YPF a la que curraban los proveedores o los políticos. Ahora, estamos hablando de una empresa que tiene que rendir lo que tiene que rendir. Primero están los intereses de la patria. Si nosotros no somos sensatos a la hora de ponernos a trabajar por la defensa de esos intereses detrás de nuestra Presidenta, estamos fritos.