sábado, abril 21, 2012

Malvinas y el valor de UNASUR - Malouines et la valeur de l'UNASUR


Declaración de Ushuaia y diplomacia

Lejos de ser un debate con punto final, Malvinas es clave dentro de un proceso de integración que incluye a muchos países y gobiernos que se suponían ajenos a la causa.

La pregunta que les cabe hacerse a todos los argentinos, y por qué no a todos los latinoamericanos interesados en el asunto es: ¿Qué significa para Argentina y para la región Malvinas? Muchos podrían adherir a los conceptos soberanía, recuperación, patriotismo; pero hay uno que resuena como lo más importante e interesante: integración.

Como afirmó la presidenta argentina, Cristina Fernández, en Cadena Nacional, Malvinas no puede tomarse sólo como una causa nacional sino para transformarse en una causa regional, latinoamericana.

La Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), enorme proceso de integración regional, es uno de los entes que más trató el tema Malvinas como incumbencia propia.

Desde el 2005 -tras las manifestaciones contra del Área de Libre Comercio (ALCA) en la Cumbre de las Américas y su paralela de los Pueblos en Mar del Plata, Argentina- se afianzó el poder de integración de los países de Sudamérica y que ahora se observa en el tratamiento del conflicto con las Islas del Atlántico Sur y el espacio marítimo circundante.

Al apartarse un poco del tema planteado –Malvinas- se puede ver el concepto de integración latinoamericana actuando dentro de otro conflicto reciente. El Presidente de Ecuador, Rafael Correa, declaró que no entiende la “incomprensible exclusión" de Cuba de la VI Cumbre de las Américas. Por lo tanto, reafirmó que "no puede denominarse Cumbre de las Américas a una reunión de la cual un país americano es intencional e injustificadamente relegado".

El presidente ecuatoriano atribuyó la ausencia de Cuba al "veto de países hegemónicos", en alusión a Estados Unidos, que se negó a que La Habana participara en el foro regional y alegó que en 1962 fue expulsada de la Organización de Estados Americanos (OEA), que auspicia el encuentro continental.

"Es una situación intolerable en la América del siglo XXI", subrayó Correa. Y como señala el portal de noticias www.europapress.es, el mandatario declaró que no se perdería “gran cosa” por no asistir a la Cumbre.

Por otro lado, y volviendo al tema del conflicto por las Islas del Atlántico Sur y el espacio marítimo circundante, cabe aclarar que se cuenta con el apoyo incondicional de varios países sur y centro americanos a Argentina, tales como Bolivia, Colombia, Ecuador, Perú, Brasil, Paraguay, Uruguay, Venezuela, Chile, Guyana y Surinam.

Sin dudas, este conflicto dejó muchos testimonios por parte de los presidentes que componen la Unasur, que instaron al gobierno del Reino Unido a negociar por “la disputa por soberanía” ante la “anacrónica situación colonial en suelo americano”. Como también sostuvo la página web de noticias www.noticias.terra.com.ar : “El apoyo de la UNASUR formó parte de cosecha de respaldos en foros internacionales por parte de la Argentina, en momentos en que ha profundizado el reclamo al Reino Unido para que acepte discutir la situación de Malvinas, tal como lo establece la resolución 2065 de la ONU”.

Un ícono de la lucha antiimperialista, el ex mandatario de Cuba Fidel Castro, también dejó varias sentencias respecto al tema. Castro declaró que los británicos “están desesperados, y así reaccionaron cuando Uruguay vetó recientemente la entrada del barco inglés con bandera de las islas Malvinas”. Además, no titubeó al afirmar, como bien destaca el diario argentino Página 12, que al Reino Unido “no le queda más remedio que negociar e irse” y agregó que “es tan descarado lo que han hecho, hasta mandaron un barquito, un destructor y un helicóptero con un príncipe que es piloto”.

También hizo su aporte otro luchador de la paz: el Premio Nobel Adolfo Pérez Esquivel, que, según Página 12, junto a Fidel compartió una jornada en la Feria del Libro de La Habana. Pérez Esquivel enfatizó que “David Cameron le ha hecho un gran favor a toda América con sus actitudes. Los ingleses no tienen nada que hacer ahí. No les queda más que negociar para luego irse”.

La presidenta Cristina Fernández también recibió el apoyo de su homólogo chileno, Sebastián Piñera, quien afirmó que "la posición del gobierno chileno es clara y firme: apoyamos el derecho de la Argentina, por razones jurídicas e históricas, sobre las islas Malvinas y también sus islas aledañas".

Piñera fue increpado por el diario argentino La Nación acerca de la posibilidad de interrumpir el vuelo de Punta Arenas (Chile) a Malvinas, pero el jefe de Estado chileno replicó que "ese es un tema que me mencionó la presidenta argentina durante nuestra reunión en Nueva York, con ocasión de la ONU, pero no nos ha planteado ninguna petición específica al respecto".

Otro presidente que también se pronunció a favor de la soberanía argentina sobre el archipiélago es Ollanta Humala. El líder peruano transmitió su apoyo mediante una carta, según informó el sitio www.peru.com

En ese texto se pueden destacar frases como: “Tengo el honor de dirigirme a Su Excelencia a fin de transmitirle las expresiones de solidaridad y apoyo del pueblo y del Gobierno del Perú a los legítimos derechos de soberanía argentina sobre las Islas Malvinas, Georgias del Sur, Sándwich del Sur y los espacios marítimos circundantes”. Además, el mandatario agregó: “Mi gobierno respalda la aspiración argentina para lograr un entendimiento pacífico con el Reino Unido, a través del diálogo y la negociación. En ese sentido, compartimos su preocupación por el incremento de la presencia militar en las islas”.

Pero en este caso, más importante que las palabras son los hechos. Por ese motivo, es de destacar que la materialización de la decisión de los Estados componentes de la Unasur de impedir que barcos comerciales con bandera británica atraquen en puertos de la región, fue llevada a cabo por el gobierno de Perú en el momento en que canceló la visita de la fragata de la Armada Británica HMS Montrose.

Este es el indicador tal vez más importante de la construcción de un apoyo incondicional dentro bloque.

APAS entrevistó al diputado nacional argentino Guillermo Carmona -del gobernante Frente para la Victoria-, presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores y Culto de la Cámara de Diputados de la Nación. El legislador sostuvo que, en primera instancia, el tema Malvinas resurgió con tanta fuerza porque “hay una cuestión conmemorativa, por el hecho de que este año se cumplan los 30 años de la Guerra de Malvinas y, por otro lado, el próximo año, los primeros días de enero se van a cumplir 180 años de la ocupación ilegal de Inglaterra respecto de las Malvinas”.

Pero también advirtió que, “aparte de esta cuestión conmemorativa, tiene que ver, básicamente, con que en los dos últimos años, Inglaterra inició un proceso de autorización de explotación petrolera en el Atlántico Sur. Esto generó reacciones diplomáticas argentinas. Y este año aparece con una especial fuerza la militarización de las Islas del Atlántico Sur por parte del Reino Unido”.

El diputado destacó además que “la reacción argentina no sólo está vinculada a la cuestión de la soberanía territorial, sino también a la soberanía sobre los recursos naturales como la pesca, los hidrocarburos”.

Carmona también aportó su punto de vista sobre cómo afecta este reclamo por Malvinas a toda Latinoamérica. “A partir del año 2003, con la llegada de Néstor Kirchner a la presidencia, se puso en la agenda la causa Malvinas y se inició un enorme proceso de integración regional. Donde ésto se ha visto desarrollado con mayor nivel de profundidad ha sido en la construcción de Unasur”. Y tampoco dudó en destacar que se ha dado “en una forma sorprendente e inédita, la adhesión de los países caribeños, la mayoría de ellos vinculados a la Corona Británica”.

En cuanto a la Declaración de Ushuaia, documento producido por las dos comisiones legislativas de Relaciones Exteriores, Carmona expresó que es un testimonio escrito que “sintetiza la posición del Congreso Nacional respecto de la cuestión Malvinas. Cada partido aportó su documento y a partir de eso fuimos encontrando los puntos en común, y así fue como surgió la Declaración de Ushuaia. Hay que reconocer que la política de Estado respecto de la cuestión Malvinas tiene como fundamento lo que establece la Constitución Nacional en la Disposición Transitoria Primera, que refiere a la soberanía imprescriptible de la República Argentina sobre las Malvinas, Sandwich del Sur, Georgias del Sur y el área marítima circundante”, declaró a APAS Carmona.

En lo que respecta al consenso que Argentina busca a nivel internacional para que se produzca un mediación diplomática, el legislador afirmó que “frente a la mala disposición de Inglaterra de sentarse en la mesa de negociación, desde el Congreso hay que seguir creando condiciones. Es por eso que la Declaración de Ushuaia la estamos mandando a todos los parlamentos del mundo. El 14 de junio va a estar la Presidenta en el Comité de Descolonización de la Organización de Naciones Unidas, y allí de forma categórica y contundente Argentina va a reafirmar su planteo de soberanía y va a reclamar que el Reino Unido se siente a negociar”.

Finalmente, el diputado argentino afirmó que “Malvinas, Georgias, Sandwich, el espacio marítimo circundante son parte de la Argentina, son parte de Suramérica, y, por lo tanto, son parte de Latinoamérica. La emancipación latinoamericana por la que lucharon San Martín, Bolívar, O’Higgins, Artigas, Rosas, Perón, Néstor Kirchner, no va a ser completa hasta tanto la Argentina recupere las Islas Malvinas. Recién en ese momento podremos pensar en la emancipación de toda potencia extranjera, como proclamábamos en nuestra etapa independentista. Allí va a estar verdaderamente alcanzada. Por eso es que hoy tenemos un objetivo común, no sólo Argentina, sino todos los países latinoamericanos”.

Redacción de APAS
prensamercosur.com.ar

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