La YPF controlada por Repsol envió al
exterior U$S 41 mil millones entre 2001 y 2010
La
recuperación del control de YPF por parte del gobierno nacional se encuadra en
lo que se ha definido como soberanía hidrocarburífera de la República
Argentina, cuyo objetivo principal es el logro del autoabastecimiento de
hidrocarburos.
De hecho, en los últimos años, se pudo observar
una política de vaciamiento por parte de la petrolera YPF Repsol, generado en
la ausencia de exploraciones y de producción, que en el devenir nos fueron
transformado en un país inviable energéticamente hablando y paradójicamente, no
por la falta de recursos naturales, sino por la ausencia de inversiones por
parte de YPF Repsol que entre 2001 y 2010 remesó al exterior, según versiones,
unos aproximadamente U$S 41 mil millones.
Es correcto y
justo el mensaje presidencial al decir que somos el único país de América que
renunció a tener el control de la renta sobre sus recursos naturales no
renovables. Se trata pues de la recuperación de la soberanía y el control de
los hidrocarburos lo que está en juego y, además, la definición de hacia dónde
debe invertirse, esto es, orientar la inversión como tantas veces nos dijo el
Aldo Ferrer en los ’70 era la clave para crecer sostenidamente.
El tema no es
una estatización, sino recuperación de la soberanía y del control de un
instrumento fundamental, lo que a priori nos permite suponer que la explotación
hidrocarburífera será concretada por capitales nacionales y no por el Estado.El
mensaje 529, tiene 3 títulos: Título 1: De la soberanía hidrocarburífera de la
República Argentina; el Título 2, que en dos artículos define la expropiación,
y ellos son el Artículo 7º: a los efectos de garantizar el cumplimiento de los
objetivos de la presente, declárese de utilidad pública y sujeto a expropiación
el 51% del patrimonio de YPF SA, el Artículo 8º: las acciones sujetas a
expropiación de la empresa YPF SA quedarán distribuidas de la siguiente manera:
el 51% pertenecerá al Estado nacional y el 49% restante se distribuirá entre
las provincias integrantes de la organización federal de estados productores de
hidrocarburos, por último el Título 3: nos habla de la recuperación del control
de YPF. Los ocho artículos que componen el plexo jurídico, remiten al hecho
como el paso necesario para el logro del autoabastecimiento pero en una manera
equitativa y sustentable entre las provincias y las distintas regiones. Prevé
el concurso del capital tanto privado como publico, la maximización de las inversiones
y lo que no es menor, la incorporación de tecnología.
Muy bien
también lo ha aclarado la presidenta: que se debe velar por la protección de
los intereses de los consumidores en temas relacionados con el precio, calidad
y disponibilidad de los derivados de los hidrocarburos; donde tampoco es menor
el acento que puso en: la obtención de saldos exportables para el mejoramiento
de la balanza de pagos garantizando la explotación racional de los recursos y
la sustentabilidad de su explotación para el aprovechamiento de las
generaciones futuras.
Este es todo
un paso a la recuperación del rol de Estado en el desarrollo equitativo y
sustentable para el desarrollo del país.
Enrique Dentice