martes, julio 31, 2012

MERCOSUR ya es Gigante ! - Le MERCOSUR est déjà géant! -

Olimpíadas: como está el medallero histórico de la Patria Grande - Jeux Olympiques: c'est que la médaille historique de la Grande Patrie

Humor: se conocen más reacciones de EEUU por la Reunión del Mercosur... - L'humeur: plus de réactions sont connus aux États-Unis par l'Assemblée du Mercosur ...

Más sobre la trastienda en la vida política de la Argentina de esta semana


1- Cuando se realice en Brasilia la cumbre de mandatarios del Mercosur, la estrella será Hugo Chávez porque se formalizará la incorporación de Venezuela a ese sistema de integración, trámite nada pacífico porque ha dividido a varios de los Gobiernos con sus oposiciones políticas, como ocurre en Brasil y Uruguay. Allí siguen las quejas por el «fast track» de ese ingreso, al amparo de la crisis que sacó del juego al Paraguay, que tienen motivos políticos y económicos. El trío Cristina-Dilma-Pepe (Mujica) no parece dispuesto a ofrecer brechas a sus críticos, que no tienen mucha envergadura en Buenos Aires, pero sí en Montevideo y en Brasilia.

El propio vicepresidente Danilo Astori se alzó con críticas a ese ingreso y en el Senado brasileño ya están en curso protestas judiciales de suerte incierta porque en realidad se trata de una decisión política que no tiene tribunal de apelación. Igual, los presidentes decidieron amortiguar el foro crítico y por eso no invitaron a la cumbre a los presidentes de los países asociados al Mercosur, como Chile o Bolivia. Chile es el país más prevenido contra la expansión chavista, pero además podría acercar a la reunión otros reproches, como el enojo por la derogación por parte de la Argentina del tratado que impedía la doble imposición a los negocios binacionales. Ese entuerto encrespó a los chilenos, que dedicaron varios días a criticar a través de la prensa la decisión, que admiten, sin embargo, no implica pérdidas significativas a sus empresas. Por eso esperan los resultados de negociaciones secretísimas entre funcionarios de los países para llegar a un nuevo acuerdo que disuelva las acusaciones de la AFIP de que ese tratado lo usarían empresas de los dos países para eludir y hasta evadir el pago de ciertos tributos. Que no viaje la semana que viene Sebastián Piñera a Brasilia como observador a esa cumbre impide cualquier posibilidad de que ese tema se plantee ante Cristina.

También busca el Gobierno alguna manera de mitigar las críticas de España por la suspensión de un tratado similar que, aquí sí, encarece el negocio en el país para las multinacionales españolas. Hacia adelante tendrán que prepararse otros países porque la decisión del Gobierno argentino, explícita en boca de algunos ministros del gabinete, es revisar todos los tratados de doble imposición y de protección recíproca de inversiones que ha firmado el país y que no se compadecen con el modelo de economía autárquica en que está embarcado el Gobierno como forma de protegerse de la crisis financiera internacional.

2- Lo que más miga dejó, e invadió los quinchos del fin de semana, fue el acuerdo para asistir a Buenos Aires en la regularización del pago de sueldos y aguinaldos, algo que los opinólogos y hasta algunos participantes de ese pacto no terminan de explicar, quizá para evitar mencionar con crudeza razones de Estado que lastiman en la cúpula. Cómo reconocer que la reacción de la Nación la previene de pagar el costo político de que al final los que no cobran en Buenos Aires se pregunten por qué no llega ayuda de Economía a la provincia. Uno de los negociadores del sciolismo que frecuenta la residencia de La Ñata -con las puertas entornadas durante el fin de semana para quienes buscan fútbol, pero franqueadas para funcionarios y asesores que dialogaron con el gobernador- puso la explicación en lo obvio: en un momento de desaceleración de la economía no era la mejor señal prolongar la crisis. En esos corros son escuchados con atención algunos cristinólogos que intentan traducir con alguna claridad expresiones de la Presidente que son entre herméticas y capciosas, pero cargadas de sentido.

Esos expertos tratan de traducir lo que les dijo Cristina de Kirchner a los periodistas el día que se reunió con Daniel Scioli para cerrar el acuerdo: «Bueno, chicos, gracias, parece que estuviéramos firmando la paz en Siria». Por lo menos, dicen los cristinólogos, se admite que había -o hay- una guerra.

Cristina y Chávez, por la alianza entre PDVSA e YPF - Cristina Chavez, l'alliance entre PDVSA et YPF


El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, dijo que espera firmar en Brasil una alianza con su par Cristina de Kirchner entre las petroleras YPF y PDVSA, cuestión en la que ya avanzó días atrás el ministro de Planificación, Julio De Vido, en su paso por Caracas.
Chávez también señaló que planea conversar en Brasilia con la presidenta Dilma Rousseff sobre una alianza energética entre Venezuela y Brasil, aprovechando la cumbre que acordará el ingreso pleno venezolano a Mercosur, y que podría hacer otro tanto con Argentina.
El bolivariano recordó que la semana pasada estuvo De Vido de visita en Caracas, quien revisó con el ministro de Energía y Minería, Rafael Ramírez, los planes para sellar una alianza entre la petrolera venezolana PDVSA e YPF.
"Llamé a Cristina para que los documentos que se trabajaron con De Vido, sí están listos para mañana, es posible hacer una reunión bilateral para revisar los documentos y ojalá firmar la alianza PDVSA-YPF", explicó.
El gobierno venezolano no reveló los avances logrados en las reuniones de la semana pasada en Caracas, aunque habló de la posible participación argentina en la explotación de crudo en la llamada Faja del Orinoco, un vasto yacimiento de crudo pesado, así como el incremento de las exportación de productos a Argentina.

Fuente: http://www.ambito.com

Intimidades y la trastienda en la vida política de la Argentina de esta semana - Intimités et le dos à la vie politique de l'Argentine cette semaine


Las Charlas de Quincho de esta semana 
publicadas por Ambito Financiero

Quinchos teñidos de olimpismo los de esta semana, sobre todo por algunas enseñanzas que dejan estas competencias y que pueden ser aplicadas a la política. La pelea que por estos días sostienen la Argentina y Uruguay (y no precisamente en el marco de los Juegos) comenzaría a resolverse en un tercer país al que viaja la Presidente. Más lejos, un magnate mexicano abrió un museo fundado por él para escuchar a expertos recomendar una fuerte ayuda a un país en crisis (no es de la región). Más cerca, en el conurbano, volvió el fútbol a una quinta en la que el dueño insistió ante sus compañeros que no se va de donde está, porque no tiene intención alguna de regresar a un deporte que cultivó de joven (más referencias olímpicas). Veamos.


Carlos Brown, Jorge Enríquez y Luciano Miguens, el sábado en la Exposición Rural, minutos antes de que hablara Hugo Luis Biolcati. Poca presencia de empresarios y opositores en la ceremonia.; El legislador porteño por el macrismo Cristian Ritondo festejó su cumpleaños junto con el ex K Diego Kravetz y el jefe de Gabinete porteño, Horacio Rodríguez Larreta. Sopló velitas en dos tortas con los colores de sus equipos preferidos.
  El aire olimpista que inundó el planeta descolocó a los artesanos de la política, que buscan espacio en la atención del público imantada con las imágenes que llegan de Londres como si se tratara de otro mundo. Por ejemplo, unos juegos en donde no está presente el fútbol argentino, capítulo poco explotado por los activistas de la autoflagelación criolla. Cristina de Kirchner preparó para el contraataque un acto para la tarde de hoy en donde hará anuncios de ampliación del formato del programa de subsidios a la transmisión gratis de los partidos, una singularidad local que no ocurre en muchos países, con lo bueno y lo discutible que signifique eso. Parecerá lo más importante de la semana, pero no es así: la agenda que tiene desde esta noche en Brasilia la acerca a una de las extravagancias regionales. Viaja después del acto del fútbol a una cumbre del Mercosur cuyo escenario atornillaron los presidentes para que nada se imponga por sobre el titular del ingreso de Venezuela a esa organización Mercosur, algo que se sigue discutiendo pero que el presidente del Uruguay, José Mujica, simplificó con una fraseología socarrona: «No es que ingresa Venezuela al Mercosur, es el Mercosur el que ingresa a Venezuela».

Lo dijo en la semana en una comida con exportadores de su país, ante quienes defendió esa incorporación con otras sentencias, como: «¿Podemos ser tan idiotas en el mundo de hoy de renunciar al emporio de la energía?», al recordar que un ministro alemán le dijo que si Rusia -parado sobre el gas y el petróleo- pidiese el ingreso a la Unión Europea se lo aceptarían en el acto. Pero estas simplezas con las que se expresa el «Pepe» uruguayo son las que pueden convertir este viaje a Brasilia -cortísimo, entre esta tarde y mañana a mediodía, incluyendo un almuerzo- en un dolor de cabeza para la Presidente por el entuerto, casi un blooper, que se estudiará mañana como una rareza tercermundista, el dragado del canal Martín García. En el fin de semana Cristina se atosigó de lecturas de declaraciones y clips de prensa para terminar de entender algo que pocos pueden explicar de este caso que está haciendo tambalear a la cúpula de la Cancillería uruguaya y ha puesto de punta a los dos gobiernos en algo que parecía tan pacífico como negociado. Algo natural en un contrato que tiene un monto de entre u$s 14 y u$s 21 millones al año. Cuesta entender qué pasó porque hasta nuevo aviso lo que sucedió es que una revista uruguaya (Caras y Caretas) publicó hace dos meses el cuento de que alguien había hablado de una coima para que los funcionarios de los dos gobiernos jueguen una mancha venenosa que impregnará la apertura hoy de los sobres de la licitación de ese dragado que ocurrirá en Buenos Aires.

Los funcionarios argentinos se indignan porque desde Uruguay se lanzó esa noticia y señalaron hacia el otro lado del río sin decir qué coima hubo, quién la pagó, quién la cobró, de cuánto es. ¿Porque salte la palabra «coima» tienen que mirar para acá?, se quejan en Buenos Aires. En Montevideo todos miran como vocero de esa campaña al exembajador en Buenos Aires Francisco Bustillo, presidente por su país hoy de la Comisión del Río de la Plata, que debe decidir esa licitación con su contraparte argentina, encarnada en el entrerriano Hernán Orduna. Entre las preguntas que lleva la delegación criolla a Brasilia (en donde Mujica ha asegurado que hablará con Cristina del asunto -pese a que la Presidente minimizó el viernes la intriga y dijo que ella no tiene nada que hablar, que en todo caso lo hagan los cancilleres-) figura ésta: ¿por qué Bustillo promovió esa leyenda cuando antes había apoyado a la empresa cuestionada hoy?

Por eso el Gobierno argentino lanzó el dardo anoche en un comunicado que se pregunta ¿quién protege a Riovía? -la empresa en cuestión-. Otra pregunta: ¿es cierto que a fin de año Bustillo hostigó al delegado argentino Guillermo González hasta que logró su renuncia y a quien agravió con un término que ha quedado registrado en el acta de sesiones de la CARP (sigla de la Comisión del Río de la Plata)? Otra, de corte más malintencionado, recuerda que Bustillo fue investigado en Buenos Aires por el trámite de dos autos Porsche con placa diplomática y que no se llevó el mejor recuerdo de los argentinos. Igual el canciller Luis Almagro lo sostiene en el cargo, pese a que disparó una pelea que resiente las relaciones entre los dos países. Mujica la esperará esta noche a Cristina en Brasilia para hablarle de este tema con la intención de salvar el contrato del dragado; si ese concurso o licitación se cae pueden quedar comprometidos en sus cargos el canciller Almagro y el propio Bustillo porque la Argentina ya dijo que si quieren hablar de coima que frenen todo el trámite.

Para «Pepe» es un drama, y también para Cristina, porque Uruguay tiene el Gobierno más pro argentino de la región y cada barquinazo que sucede en las relaciones lo expone al uruguayo a los latigazos de su oposición, que le pide cabezas por este caso. Mujica cree y dice que la suerte de su país está ligada a la de la Argentina. «Se te rompen los ojos -le ha dicho a sus ministros- cuando te enterás de todo lo que son dueños los argentinos en el Uruguay. ¿Cómo nos vamos a pelear con ellos?» En esa comida con exportadores sentenció: «¿Qué quieren que hagamos, que les pinchemos un ojo? Si alguno tiene otra receta que nos la den, porque parece que las relaciones fueran cuestiones de guapos, que hay que golpearse el pecho como en un mostrador. No se puede defender el trabajo de la gente así. Tengo la obligación de pensar en el trabajo de los uruguayos y tragarme las culebras y los sapos que sea, siempre y cuando esté defendiendo el trabajo de la gente».

Igual se trae algo fuerte bajo el poncho con el propósito de liberar la contratación del dragado, clave para el funcionamiento del puerto de Montevideo: todavía no ha enviado al Congreso de su país el mensaje con el proyecto de ley para ratificar el acuerdo de canje de datos fiscales entre los dos países que en Buenos Aires ya se sancionó. Eso demora la pretensión argentina de acceder a los datos de inversores que se fueron con la música (los dólares) a otra parte. Entre los funcionarios de Mujica existe la idea de demorar todo lo posible ese acuerdo para proteger su economía. Aun cuando lo sancione el Congreso -tardará meses- existe la idea de suspenderlo en su aplicación. Pero esto es una herramienta oculta que por ahora no usará Mujica, que cree que la batalla del dragado es en esta cumbre más importante que su motivo formal, la incorporación de Venezuela. Para atender esas rispideces es que en el embajador en el Uruguay Dante Dovena adelantó su viaje a Brasilia anoche, lo seguirá en la mañana de hoy Héctor Timerman, adelantados de la comitiva de Cristina de esta tarde, en la que figura Julio De Vido.

Para completar estas globalidades, un apunte mexicano: Carlos Slim, quien pelea los primeros lugares de la lista de millonarios del planeta, abrió el Museo Soumaya de la ciudad de México -construido en homenaje a su mujer, Soumaya Domit fallecida en 1999- para un grupo de disertantes del llamado Círculo de Montevideo, entre ellos Enrique Iglesias, Julio María Sanguinetti, Ricardo Lagos, José María Insulza, el argentino Carlos Magariños, Belisario Betancourt, Manuel Marín y Felipe González, quien concentró la atención por lo que podía decir sobre la crisis de su país. «Hay que sacar un plan de acción para que España salga adelante y decirle al resto de la Unión Europea que los muertos no pagan y que los enfermos pagan poco». Horas antes el saliente presidente Felipe Calderón había abierto el encuentro con medio gabinete.

De la Argentina no se habló aunque en todos los encuentros Magariños era interrogado con interés por los otros participantes. Respondió con dos afirmaciones: primero, que el déficit fiscal es un arma que se usa una vez y listo. Después se la debe recargar (ahorrando y generando superávit). Agregó que «si a la economía se le va a aplicar un antídoto, hay que dárselo todo de golpe. Si se lo dan en cuotas, el virus se acostumbra a la cura».

Era esperable que el olimpismo alcanzase también a La Ñata, residencia de Daniel Scioli, en donde ayer volvió el fútbol pero sin intención de competir con las imágenes que vienen de Londres: no hubo fotos del encuentro entre el equipo del gobernador que venció a América del Sud, un equipo de Avellaneda que salió segundo en el campeonato de Futsal de la AFA. Scioli, que se perdió buena parte de la transmisión del viernes de la inauguración porque debió atender la tragedia de la muerte de tres niños en el partido de Moreno, atrocidad que enfrentó a vecinos con policías, acercó su propuesta para los futuros juegos de Brasil en 2014, que se incorpore la especialidad del Futsal a las olimpíadas, algo plausible si ya tienen esa categoría juegos tan inocentes y poco exigidos como el vóley femenino sobre arena, algo espectacular si se lo sabe mirar, pero de entidad deportiva menos compleja que el Futsal. Ya está la campaña.

En esos salones de la residencia de La Ñata lo que dominó, claro, fueron la política y las finanzas, aliviadas no sólo por el auxilio de los $ 600 millones para aguinaldos y la autorización del bono para proveedores de $ 900 millones, sino por el nuevo producto que en la semana que pasó buscaron colocar sus funcionarios entre empresarios y bancos. Se trata de un bono en dólares por 50 millones que pagará una tasa del 9%, que con el juego en alza de la divisa lo prometen como una inversión estrella que ayudará a regularizar los pagos. Debió, ante el requerimiento de los propios seguidores del entorno íntimo del gobernador, marcar alguna línea, con tanto opinólogo que le propone a Scioli saltos hacia uno y otro lado como estrategia política. Disparates, insiste cuando habla de eso, como ayer en la sobremesa después del partido con América del Sud. «Me quieren marcar los tiempos y eso lo manejo yo. Que quede claro: yo volver a correr en lancha no quiero, ¿eh? Con Cristina las cosas las tengo más que claras y se equivocan siempre los que apuestan a la pelea. ¿Que la gente sea diferente quiere decir que sean enemigos o adversarios? Los que especulan con saltos están pensando en su interés y no en el nuestro, no se dejen engañar, como con eso de que Karina va a ser candidata. Candidata a nada. Siempre me acompañó, y lo va a seguir haciendo, pero no en contra de nadie».

Del otro lado de la mesa, silencio, porque ya es un monólogo en el que pesa cada palabra. «¿Que me voy ir del kirchnerismo? ¡No entienden nada! Como los que dicen eso de Sergio Massa. Si es imposible que haya alguien más kirchnerista que Massa. Vamos a seguir con el método de siempre, ¿o acaso la Argentina no perdió cada vez que las posiciones contrarias escalaron? Vamos a seguir en la misma, estuve dos veces con Cristina en la semana y todo fue afecto y respeto, lo malo es cuando las segundas líneas hablan de más. El desafío es durísimo en el mundo de hoy, por eso hay que inspirarse en cosas como las olimpíadas. ¿Saben qué lección es la que me deja eso? La gente que hace sacrificios durante mucho tiempo, poniendo todos los recursos y en un instante, en la primera competencia, se queda afuera pese al esfuerzo. De esas cosas se puede aprender mucho. Para la política, claro», remata, ya cuando la parrilla era apenas un rescoldo que llamaba a la siesta inevitable de los domingos.

Con el megaquincho de la Argentina que es la Exposición Rural abierto, era inevitable darse un paseo por sus escenarios y salones, que arrojaron el fin de semana una constatación de utilidad política: la gran diferencia que hay entre lo que ocurría durante el día en los comedores -especialmente el «Central» que proveen los hermanos Petersen- con la convivencia de dirigentes, políticos y empresarios, y las tribunas del acto central de inauguración de la muestra. Allí se raleó la representación empresarial -el más importante fue Eduardo Eurnekian- y dominó la política con la presencia de radicales, macristas y peronistas disidentes. Los hombres de negocios prefieren escapar a las señales que se lanzan desde esas tribunas para dedicarse en las mesas que se abrieron durante la semana al lobby, los intercambios y, de paso, algo a la política, pero no partidaria.

De todas las actividades -muy contadas ya por la prensa-, la que pocos advirtieron en importancia fue el cóctel del sábado a la noche que ofreció la directiva de la Rural a ganadores de premios, diplomáticos y dirigentes de entidades hermanas del interior y del extranjero. Hubo dos presencias notables: una, la del exministro Roberto Lavagna, que pasó por ese cóctel como parte de una actividad que si no es de campaña política, se le parece mucho. El otro, Adelmo Gabbi, presidente de la Bolsa de Comercio, lo más parecido a un oficialista de lo que se vio en la Rural, quien conversó con todos de sus proyectos, como la creación de una universidad de la Bolsa. Funcionará en el edificio de la calle Viamonte que fue del banco Extrader y que después ocupó Cassaba, la fenecida caja de jubilaciones de los abogados porteños, de cuya extinción -repartiendo plata entre los abogados aportantes- se ocupa el exlegislador radical Jorge Enríquez. Hasta que salga la demorada ley en la Legislatura para que se termine de liquidar Cassaba, Gabbi ha cedido el edificio que compró la Bolsa en un remate por $ 13 millones en comodato para que funcionen allí las oficinas de Enríquez, que encabezó una pequeña representación política en ese cóctel del sábado, integrada por las macristas Lidia Saya (junto a su marido, el recaudador Carlos Walter) y Lía Rueda, Marcelo Meis, el diputado Ricardo Buryaile, los dirigentes de las entidades rurales y empresarios de las firmas que organizaron almuerzos durante la semana en el «Central», entre ellos los Sánchez Córdova (Finansur), los Neuss, Martín Cabrales, Cristiano Rattazzi, «Tato» Lanusse, Juan Pablo Maglier, Alejandro Macfarlane, José Ignacio de Mendiguren, Daniel Funes de Rioja.

lunes, julio 30, 2012

RobertoLomje se manifiesta en respaldo a Víctor Hugo Morales @vh590


 Contra la burda e idiota campaña del Grupo Clarín, GarcaLanata, Perfilde la mentira, Noticias servidumbre barata de Magnetto...

Este Blog DECLARA: Respaldo absoluto hoy y siempre
a Víctor Hugo Morales… ¡Venceremos!


Respuesta de Víctor Hugo Morales ante el nuevo engendro contra periodistas de izquierda o nacionales y populares:

Mis respuestas a las preguntas 
de la revista Noticias

 
Tapa de la Revista Noticias

N: En “UruLeaks” señala: “Traté con correctas personas de la actividad militar”. Y aclara: “No desarrollé ninguna de amistad con alguno de ellos, pero conocí personas a las que guardo cierto afecto: aquellos con los que pude discutir sintiendo que no corría riesgos”. ¿Podría mencionar a alguno o algunos de aquellos militares, y señalar en que circunstancias abonó “cierto afecto”?

VH: -Conocí a un oficial llamado Walter Di Carlo. Era a su vez amigo de una persona que sigue siendo íntimo amigo llamado Pedro Ocampos, notorio coiffeur. Vivían casi pegado y charlamos muchas veces. Si lo viese ahora, al cabo de treinta años, me daría gusto. Era un tipo con el que discutíamos con pasión y lo sentía un militar demócrata. El Mayor Grosso, al que conocí como consecuencia de una anécdota deportiva, fue generoso en ciertas advertencias formuladas tras verme discutir y en función de lo que escuchaba en la radio. Me dio a entender, en una ocasión, que había gente que me tenía entre ojos. Salvo que en su testimonio me defraude, tendría gusto en encontrarme con él. El Capitán Cedrés era dirigente de Huracán Buceo y pasaba siempre por la cabina.

No me acuerdo de haber tenido otra relación con él. Pero lo voy a situar en 2012. ¿Sabe cuál es el político con el que almorcé más veces en mi vida? MAURICIO MACRI.

En los últimos seis o siete meses, dos veces. En Barracas. Estos últimos, los dos mejores almuerzos en cuanto a calidad de los últimos años. ¿Sabe como charlamos?

Discutiendo a las risas. Con respeto. Una buena pulseada delante del director de la radio una vez y la directora de programación la segunda. Hay otros encuentros, muchos más. Pero los de ahora por la discusión política son más interesantes de citar. Salvo Florencio Randazzo de casualidad en Villa Gesell hace dos años, y hace poco la segunda vez, con nadie del poder he tenido ese contacto. ¿SABE CUÁL ES EL LIBRO DE HABERKORN DENTRO DE DIEZ AÑOS, PAGADO POR CLARÍN, PRODUCIDO POR MAJUL, PROLOGADO POR LANATA Y PROMOCIONADO DE PURO ALCAHUETES POR PERFIL? que yo en realidad no era tan del gobierno como se decía. Que Haberkorn tiene testimonios fidedignos, que yo me reunía a escondidas con él. Que le tiraba algunas pálidas como que pensaba distinto, pero en realidad estaba a su servicio. ¿Sabe lo que son, Baerkor, usted y todos los demás? Una caterva de no le digo qué, porque si no tendría derecho a quitar la frase; y quedamos en que usted respetara lo que yo diga.

N: “UruLeaks” buscó salir antes que “Relato oculto”, el libro de los periodistas uruguayos Leonardo Haberkorn y Luciano Álvares, cuya preparación yo había adelantado en mis notas de marzo, lo mismo que la inquietud que ello le generaba. ¿Cuál es el valor exacto que le asigna a la documentación presentada en “UruLeaks”? ¿Qué probaría concretamente?

VH: -Los Archivos son exactamente como me visualizaba la dictadura. Jodido, persistentemente de izquierda, con proyección política desde ese palo, taimado. Es lo que está escrito, no dicho en el aire por testimonios orales treinta y cinco años después. Sólo a un imbécil se le puede ocurrir que eso es comparable. Lo escrito por los servicios de inteligencia contra la versión oral de quienes ahora seguramente hablan desde una fuerte intencionalidad política. A que el libro no tiene una línea escrita, una carta, un pedido, un saludo de cumpleaños.

INFORME SECRETO DEL EJERCITO VERSUS TESTIMONIO ORAL MANEJADO POR QUIEN DE LA MISMA MANERA ESCRIBIÓ UN LIBRO EN EL QUE DENUNCIA QUE LOS TUPAMAROS ERAN CÓMPLICES DE LOS MILITARES, QUE TORTURABAN JUNTOS, QUE ALLANABAN JUNTOS, QUE SE VENDIERON A LOS MILICOS PARA LLEGAR AL PODER.

¿Usted pregunta en serio o anda todavía con el papelón de la tapa de las 24 mentiras a cuestas?

N: En el libro figuran testimonios de los oficiales de Ejército Grosso, Cedrés, Rosales, Pla, Beneditto, Velasco y Sequeira, todos del llamado Batallón Florida. Lo recuerdan (también fuentes civiles con nombre y apellido) visitando el cuartel entre 1975 y 1978 con gran asiduidad para jugar al fútbol, al básquet, al pool y a la paleta, comer y tomar “copetines” y participar de celebraciones sociales. ¿Los recuerda? ¿Son exactas esas circunstancias? ¿Formó Usted parte (como allí se indica) de la “política de apertura a la sociedad” encarada desde ese y otros cuarteles del ejército uruguayo una vez derrotada militarmente la guerrilla de Tupamaros? ¿Pudo haber sido usado sin saberlo como parte de dicha política?

VH: -Estuve dos veces con veinte compañeros. En la primera nos peleamos, nos fuimos mal por las patadas de un partido, y en la segunda hubo cordial relación y un almuerzo. Nunca más estuve allí. Los nombres que da son pocos. No formé parte de nada, pero en ese almuerzo hablé como hablo siempre, sin guardarme nada. Ellos parecían mas bien de acuerdo sobre el papel de las fuerzas armadas. Siempre fue típico en los militares hacer notar que tenían una pesada carga que no les interesaba en realidad. Eran víctimas de las circunstancias. Uno se montaba en esas ideas y le daba para adelante. Alguno estaría sinceramente de acuerdo. Otro le pasaba datos a inteligencia; había no menos de 30 en ese almuerzo y por cierto yo era uno de los centros de atención.

N: En una entrevista para Libre de 1984, usted había “jurado por lo que más quiera en el mundo” no haber tenido jamás “el teléfono de ningún militar”. Sin embargo, el episodio que se destaca en “UruLeaks” con el futbolista Julio Filippini, él recuerda que Usted le recomendó“hablar con un coronel que está al mando del operativo”. Y Filippini cuenta que lo llamó, le dio explicaciones y ahí terminó todo, por lo cual le quedó agradecido…

VH: -Patética su pregunta. Pregúnteme si tengo el teléfono de Ricardo Alfonsin, Aníbal Fernández, cualquier persona del poder. La respuesta es NO.

Pídame que lo conecte con ellos. No demoro cinco minutos en hacerlo. Por supuesto que se me abren puertas al instante. Venia de mentirle descaradamente a un militar. Me dijo “usted me va a entender, tiene tarjeta amarilla”. Pero me dio la mano, me acompañó hasta la puerta y me invitó a charlar cuando quisiera. Filippini a la distancia me estima y respeta. ¿Le parece a usted que sería así si le hubiera quedado un tufillo raro cuando llamó? ¿No le parece que tiene clarísimo 35 años después que yo estaba limpio? Un tipo que perdió su carrera por lo que declaró en mi radio y que testimonia a mi favor?.

¿No quisiera usted charlar conmigo nuevamente en una grabación, así me divierto de nuevo con su pobreza mental?

N: En una grabación de la despedida del mayor Grosso (4 de septiembre de 1977) consta un discurso suyo donde resalta la amistad y todas las veces que lo ayudó por teléfono y en persona a resolver problemas familiares, personales y profesionales… ¿Puede ser falsa esa cita grabada? De no serlo, ¿recuerda a qué tipo de problemas se refería?

VH: -Grosso fue un caballero. ¿Usted cree que todos los militares eran o son iguales?. En algún cajón debo tener una postal que me envió de la India, creo, adonde había sido destinado después.

Él medió para que volviésemos a un segundo partido, después del almuerzo en el casino de oficiales llamó y aconsejó. Septiembre del ’77. Puede ser. Yo venía de tres citas al cuartel del Prado. Declaré por lo Filipini en septiembre del ’76, y dos veces en febrero del ’77 por los episodios de Venezuela: el primero por haber metido los cantos de los exiliados, como dicen los archivos; el segundo por haberme despedido, al cabo de la trasmisión de Bolivia-Venezuela, en Caracas (partido que nos dejo afuera del mundial), diciendo “buenas noches, país del dolor”.

¿Le gusta esa Zunino?. En el apogeo de la dictadura.¿Pesca la indirecta?.

Grosso fue, sin traicionarse, un tipo que me dijo “no joda, no arruine su carrera. Lo miran. No se pase de la raya”. No recuerdo qué habré dicho, pero hoy 35 años después, le diria “usted hizo algo por mi y mi familia. Estoy seguro que si. Gracias y buena suerte.”

N: Sus acotaciones y las de colegas y amigos consultados para “UruLeaks” dejan la firme sensación de que usted se fue del Uruguay perseguido por los militares y que estuvo preso 27 días en el marco de dichas persecuciones. Sin embargo, el libro reconstruye aquellos días detenido en la Jefatura de Policía debido a que usted le rompió la nariz de una piña a alguien que se metió a separar durante una gresca en un partido de fútbol jugado en un club de patín. Usted había señalado en sus libros y en notas que era un partido en un “barrio de la Armada”y que todo había sido una especie de cama. Si así fue (cosa que en el libro se niega, incluso con el testimonio del herido), ¿le interesaría contar los detalles de la misma?

¿Inflación? ¡vamos al debate! - ¿Inflation? Ouvrons le débat!


Que la inflación es, por lejos, el principal problema económico de la Argentina, no caben dudas. Que el gobierno hace mal en ignorarlo o -mejor dicho- no hablar del asunto, tampoco.

Pero lo llamativo del caso es que todo el mundo (desde los empresarios a los periodistas, pasando por toda la dirigencia política opositora) habla todo el tiempo de cuanto le preocupa la inflación; sin arriesgar la más mínima idea sobre cuáles serían sus causas, y no porque no las sepan.

Vemos en la imagen el extracto de las declaraciones de los dos cráneos que desde Santa Fe supimos proyectar a la Nación, Barletta y Binner: uno boludeando abrazando al Indec, el otro divagando sobre que la respuesta al problema de la inflación depende solamente "de la decisión del gobierno", como si Cristina sacara mañana un decreto prohibiendo la inflación, y listo.

Y no se trata acá de defender el modo como el Indec releva los índices de precios, ni la política oficial seguida hasta acá para atacar la inflación, léase acuerdos de precios de Moreno y demases.

No señor: se trata de exigir que -sobre un tema tan trascendente y que tanto tiene que ver con nuestra vida cotidiana- se plantee un debate serio y responsable, que nos permita identificar las causas del problema (y sus responsables, con nombre y apellido), para poder pensar en encarar las soluciones.

Tomemos por caso la discusión sobre el Indec y las proyecciones de las "consultoras privadas"; ¿tiene sentido a ésta altura del partido seguir discutiendo eso, gastando horas de tiempo y energía en ver quien calcula más certeramente cuánto aumentan las cosas, en lugar de dedicarse a ver que se puede hacer para que no aumenten?

¿O acaso cuando los radicales -como Barletta- gobernaban en tiempos de Alfonsín y la inflación superaba el 6000 % anual a alguien le importaba una garcha si los índices de precios del Indec estaban bien o mal hechos?

Es como si hubiera en casa un enfermo volando de fiebre y en lugar de darle un antibiótico o llamar al médico, siguiéramos discutiendo si el termómetro funciona bien o mal.

Los críticos de las estimaciones del Indec (Barletta entre ellos) suelen decir "bueno, pero hay que empezar por reconocer que el problema existe para poder resolverlo": una pelotudez suprema, ¿qué pretenden, que mañana salga Cristina por cadena nacional a decir "es verdad, la inflación real es la que dice Melconián y está en el orden del 104 % anual"?

¿En qué cabeza cabe?, porque si de no reconocer problemas hablamos, ¿por qué razón los radicales se siguen presentando a elecciones presidenciales, para no perder el aporte del Estado a los partidos políticos?

Por no mencionar que a Barletta debería darle vergüenza hablar de esconder pobres debajo de la alfombra, cuando en su gestión municipal acá fue justamente eso lo que hizo cuatro años; como cuando quería disfrazar a los limpiavidrios y "trapitos" de promotores turísticos durante la Copa América.

Otro tanto se puede decir del brumoso pensamiento del Narosky de la política (el mayor creador de aforismo vacíos de sentido), y principal competidor en el rubro del rabino Berga: Hermes Binner.

¿Qué quiere decir con que la inflación la causa "la economía"?

Porque resulta que dentro de la economía cabemos todos: desde Techint hasta el jubilado que cobra la mínima, claro que con diferente participación en la generación de inflación.

Nosotros hace un tiempo acá (hablando del caso Papel Prensa) arriesgábamos algunas ideas sobre el tema que no nos pertenecen y son bastante conocidas: la estructura económica argentina tiene un altísimo grado de oligopolización, con grandes empresas formadoras de precios que tienen una posición dominante en el mercado, lo que les garantiza niveles astronómicos de rentabilidad, que se difunden de un modo directo o indirecto a todos los costos de esa misma estructura; y hace que los otros eslabones empresariales de la cadena quieran replicar sus niveles de rentabilidad (altísimos aun medidos en términos internacionales) y sus comportamientos depredatorios del mercado. 

En el posteo anterior al que referimos nos remitíamos a algunos datos que brinda Diego Rubinzal en su excelente libro " sobre historia económica argentina, y por allí hay que empezar a buscar, si no la única, la principal causa de la inflación en el país.  

Causa de la que ninguno de los "preocupados" por la inflación (entre los que, en el colmo del caradurismo, se autoincluyen los mismos empresarios que le dan con ganas a la remarcadora) habla nunca; y si no hagan la prueba: rastreen las declaraciones sobre el tema de cualquier editorialista de los grandes medios, o de cualquier dirirgente opositor con mediana presencia mediática, y nos cuentan si encuentran algo sobre el asunto.

Con lo que los que dicen que hay que hablar de inflación, hablan de cualquier cosa menos que de los que causan la inflación, y el asunto nos remite así a la lógica de construcción política de la mayoría de la dirigencia política argentina (excepción hecha del kirchnerismo, que también es remiso a hablar de inflación): donde se come no se manicurea.     

Lybia: a un año, se supo que la OTAN estuvo a punto de fracasar - Libye: un an, on a appris que l'OTAN était sur le point d'échouer

La guerra de Libia pudo haber 
terminado mal para la OTAN

Bajo el título de Héroes por casualidad, un informe de los servicios del Instituto de las Reales Fuerzas Británicas subraya que las fuerzas franco-británicas se adaptaron bien a la situación libia a pesar de su mala preparación para ella.
La guerra de Libia no se parece a las de Afganistán e Irak, que se basaron en la cantidad de fuerzas terrestres, sino a la de los años 1990, en la ex Yugoslavia, cuyo componente fundamental fue la fuerza aérea. Las fuerzas franco-británicas, tanto aéreas como navales, se agotaron rápidamente y no habrían podido soportar un mes más de operaciones (lo que obligó al Estado Mayor a lanzar el ataque contra Trípoli a finales de agosto, sin entrar a considerar el posible costo humano de la acción). El vasto despliegue marítimo de los aliados estuvo mal coordinado y habría resultado muy vulnerable si los libios lo hubiesen atacado.

El hecho es que, al planificar la operación, se subestimó la capacidad de resistencia de los libios y –a pesar de la denominación Protector Unificado– hubo cierta desorganización entre sus participantes, lo cual hubiese podido costar muy caro si la Yamahiriya se hubiese mostrado más ofensiva.

Aunque muchos datos siguen siendo confidenciales, el mencionado informe confirma varios aspectos importantes, como:
• El presidente francés Nicolas Sarkozy ordenó a las fuerzas francesas que se lanzaran al ataque antes de lo previsto por los demás participantes en la operación.
• Franceses y británicos compartieron los datos de inteligencia que tenían en su poder, pero los ocultaron a los demás miembros de la operación (exceptuando, claro está, a Estados Unidos).
• Fuerzas especiales estaban desplegadas en tierra desde el 23 de febrero para evacuar a los ciudadanos de los Estados que iban a conformar la coalición (a pesar de que la resolución 1973 no se adoptó hasta el 17 de marzo.
• Fueron las fuerzas estadounidenses las que destruyeron las tres cuartas partes del sistema libia de defensa antiaérea.
• Los helicópteros se utilizaron con mucha prudencia, solamente cuando se había producido una preparación anterior del terreno mediante bombardeos. De todas maneras los Estados mayores no podían utilizarlos en operaciones de ataque en un territorio tan vasto.
• La Royal Navy experimentó que éxito el uso de helicópteros Apache desde un portahelicópteros.
• Las Fuerzas Especiales franco-británicas sirvieron esencailmente para dirigir a los rebeldes que no tenían formación militar. Al no ser lo suficientemente numerosas para garantizar esa tarea, recibieron ayuda de las Fuerzas Especiales egipcias y, en menor medida, de las Fuerzas Especiales de Jordania.

domingo, julio 29, 2012

La noción del Mal - La notion du Mal

La noción del mal desempeñó –según el autor de esta nota– un papel central en la cosmovisión occidental; la modernidad ofrecía la promesa de ponerle fin y, al mismo tiempo, lo señalaba como indicador negativo del bien. 
Pero, en la sociedad actual, “el mal aparece como sinrazón, como accidente que es necesario eliminar”, y esto produce síntomas. 

  Por Miguel Benasayag *

Si bien la cuestión del mal evoca inmediatamente un territorio teológico, místico, la diferencia reside en el hecho de que siempre hizo falta mucha tinta y mucha fe para creer en Dios y que, por el contrario, nadie duda de la existencia del mal. Pero ¿qué es el mal? y ¿cómo podemos pensar hoy, en 2012, esta cuestión? 
En la tradición occidental, incluso desde sus lejanas raíces griegas, la cuestión del mal inquietó a los humanos: ¿cómo era posible que el mal existiera si la creación era fruto de divinidades?, ¿cuál era entonces la función y los orígenes del mal?

Los maniqueos consideran que la existencia del mal es producto del Angel Caído. Por lo tanto, habría dos fuentes de acción en el mundo: la fuerza del bien y la fuerza del mal.

Para Leibniz, el mal será engendrado en el pasaje de los múltiples posibles en teoría a los que llama “composibles”. El mal nace en este pasaje a la existencia de los composibles; puesto que en él hay conflicto: dado que los posibles en teoría no son todos composibles en la existencia, entonces el conflicto es –como ya lo había advertido Heráclito– “padre de todas las cosas”. Si el conflicto entre los composibles era el padre de todas las cosas, el mal es, ni más ni menos, necesario.

En síntesis, hubo una manzana, hubo una mujer que era demasiado atractiva como para negarse a compartir con ella una manzana; pecado de nacer en el pecado original, pecado de existir. El resto ya se conoce: trabajar y, sobre todo, a soportar el mal como vecino del bien. La carne es pecado, los deseos son pecado, la materia es pecado, el Occidente nace de un pecado original y, como el Occidente es la cultura que se “autodenomina universal”, toda la humanidad queda capturada por este dispositivo.

El mal es inherente a la existencia, pero, y aquí está la cuestión, los hombres y el progreso se prometieron erradicarlo.

La pregunta sería: ¿es cierto eso que piensan los occidentales, que ellos son los únicos que existen y que las otras culturas son sólo escalones “en vías de desarrollo”, es decir, en vías de llegar a ser como ellos? ¿O bien las otras culturas son, tal vez, civilizaciones en serio? Fray Bartolomé de las Casas había defendido, en la famosa controversia de Valladolid, que ¡los indios eran humanos! Salvo que... eran humanos con la humanidad incompleta. El colonialismo, el imperialismo, la normalización disciplinaria, pero también la cura, la educación, el urbanismo, iban a ocuparse de completarles la humanidad a los indios, a los africanos, a los asiáticos, a los marginales, a los locos, a las mujeres..., a todos los “incompletos” del mundo.

Occidente, fundado sobre el mito teleológico de un progreso convergente y final, marchaba hacia las luces, hacia la luz del fin (auto) prometido de toda negatividad, de todo mal: a los otros, los incompletos, seguirlos y obedecerles. Al final de la historia, en el punto omega del padre Teilhard o bien en el comunismo científico de Marx, el mal debía desaparecer.
El médico, el maestro, el colono podían así hacer el mal en nombre de un bien final: civilizar, educar, curar. La promesa de un mundo sin mal, de un mundo donde todo lo negativo debía desaparecer, estructuró las prácticas y el pensamiento de Occidente. El mañana, el futuro, fue por lo tanto, desde la gran historia hasta los ínfimos detalles de las pequeñas historias personales, lo que ordenaba y daba sentido a nuestras vidas: digamos, “hoy no se fía, mañana sí”.

Pero sucede que esta gran cultura occidental se encuentra en crisis terminal y profunda. Y una de las consecuencias más graves de esta crisis reside en el hecho de que ese mal, eso negativo que debía desaparecer, nos vuelve sobre la cara con la fuerza vengadora de lo que habíamos querido reprimir, dominar, eliminar y que nos dice cruelmente: “Aquí estoy”, el mal está aquí, lo negativo no desaparece.
Ahora bien, si intentáramos una rápida distinción entre las diferentes culturas, desde el punto de vista del trato que le han dado a la cuestión del mal, no dejaría de sorprendernos que la cultura occidental sea la única que haya apostado, que se haya estructurado alrededor de esta promesa de la desaparición final del mal. “La única diferencia que existe entre Dios y los hombres –escribía el astrónomo y filósofo Kepler– reside en el hecho de que Dios conoce todos los teoremas desde la eternidad y que el hombre no los conoce todavía todos.”

“No conocer todavía todos”, es la frase que describe la modernidad, ese recorrido temporal hacia la completud. Si el universo está escrito en lenguaje matemático (Galileo), quien conoce “todos los teoremas” controla lo real, la vida y lo existente: puede eliminar el mal.
Ninguna otra cultura que haya existido o exista apostó a esta eliminación del mal; las culturas animistas, totemistas o analogistas corresponden a sociedades que tenían una relación orgánica entre el mal y el bien. No se trata de que en estas culturas no se diferencie el dolor del placer o la alegría de la tristeza; por supuesto que sí. Sólo que esos contrarios se conciben y experimentan como parte de una unidad indivisible. Aun los maniqueos de la Mesopotamia, en el siglo III, si bien dividían claramente y oponían el bien al mal, consideraban al mal como inevitable, incluso necesario para la armonía del universo.

“Doctor, estoy mal”, enuncia el paciente frente a su terapeuta, y aparentemente todo está dicho,: “Usted está mal, debo actuar”. Nadie viene para decir: “Doctor, estoy bien”: el bien, un bien que se pretende separado y separable del mal, nos parece ser la condición necesaria y justa de nuestras vidas.
“No te pregunto a qué raza o religión perteneces; si tú sufres tú me perteneces y yo te aliviaré”: tal es el credo, el dogma de Pasteur que está escrito en el frontispicio de los hospitales parisinos. De esta manera, los cuerpos y los pueblos que sufren “pertenecen” a los doctores que los aliviarán. El mal, el sufrimiento, la tristeza, son síntomas que deben ser eliminados. Y las nuevas tendencias en psicofarmacología y terapias breves adhieren a este credo, “el mal debe desaparecer”.

Una pregunta estúpida me viene a la mente: si el mal desaparece en las curas disciplinarias de los psicofármacos o en las terapias comportamentales, ¿desaparece para dejar lugar a qué? Una vida ordenada solo en el “bien”, ¿sería bien con respecto a qué? ¿Qué es una luz sin sombras? ¿Un día sin noche? ¿Una vida sin muerte?

Artemio López: actualización de la AUH - Artemio Lopez: Mise à jour AUH

La gran medida de política social del gobierno nacional, que retrotrajo los niveles de pobreza e indigencia a los valores de 1980, dando carnadura al ciclo de desempobrecimiento más vigoroso desde la recuperación democrática, debe repensar su mecanismo de actualización anual.

En un contexto de inflación de alimentos como el que se vive, es indispensable lograr una actualización temporal más acotada que la actual, al menos actualizarse dos veces al año junto a las jubilaciones y pensiones y no una sola vez con las asignaciones familiares. Observemos que los 270 pesos actualizados en septiembre de 2011, hoy ya sólo representan 200 y en octubre, antes de ser actualizado su monto, equivaldrán a 190 pesos.
Sucede que la AUH transfiere 9 pesos diarios por beneficiario, que por las características de los hogares inferimos se gastan en alimentos y bebidas en su totalidad. Así las cosas, los 80 pesos depreciados por el aumento de precios, en el último mes anterior a su actualización equivalen a un mes menos de asignación teórica si la pérdida se diera de una sola vez e inicialmente. Al imprimirse sobre el proceso real que supone un deterioro paulatino en el curso del año, el deterioro del poder adquisitivo equivale efectivamente a 15 días menos de beneficio.

Igualmente, si midiéramos los niveles de pobreza e indigencia mes a mes, los mismos variarían significativamente. Si tomamos el lapso octubre 2011/ octubre 2012 antes de la actualización, la pobreza e indigencia pasarán de 3,0 por ciento y 16,1 por ciento en octubre de 2011 al 4,5 y 16,8 por ciento en el mismo mes de 2012, respectivamente. Para referirnos a la carencia extrema, la indigencia, umbral que por debajo de su satisfacción existe riesgo alimentario, se trata punta a punta en 12 meses, de acceder a 600.000 indigentes adicionales por falta de actualización de la AUH en tiempo y forma, de los cuales 270.000 son menores de 15 años.

* Director Consultora Equis.

Cuando estos Gobiernos pagan las deudas de los anteriores. el caso del Boden 2012 - Lorsque ces gouvernements payer les dettes de ce qui précède. le cas de Boden 2012

“Estamos terminando con el corralito” 

El ministro de Economía, Hernán Lorenzino, se refirió al pago del Boden 2012 que se realizará el próximo 3 de agosto, y afirmó que el desendeudamiento permite al Estado “tomar decisiones con absoluta libertad".     

En la apertura de la presentación del Programa de Ordenamiento de las Contrataciones y Compras Públicas, el ministro de Economía, Hernán Lorenzino, se refirió a la cancelación del Boden 2012 que se realizará el próximo 3 de agosto.
"Estamos terminando con el corralito con el claro objetivo de administrar los recursos del Estado en beneficio de la gente, apostando a la producción, al empleo y al crecimiento con inclusión social", indicó el funcionario en la sede del Banco Nación.

En tal sentido, añadió que este Gobierno "reconstruyó los tejidos sociales y la producción, incluso en este escenario internacional, realmente adverso, llegando a la gente a través de una política de desendeudamiento que nos permite tomar decisiones con absoluta libertad".

La cuenta regresiva hacia el 3 de agosto, día en el que se cancelará la última cuota del Boden 2012
El corralito financiero fue implantado por el ex ministro de Economía Domingo Cavallo en diciembre de 2001, en un intento por frenar la enorme fuga de depósitos que se estaba produciendo en el país, previo a la quiebra total de la economía.
La medida tomada por el gobierno de Fernando de la Rúa comprendía la restricción de la libre disposición de dinero en efectivo de plazos fijos, cuentas corrientes y cajas de ahorros, y se prolongó por casi un año.
Un mes más tarde al anuncio de Cavallo, el senador Eduardo Duhalde, en ejercicio de la Presidencia de la Nación, profundizó la situación de miles de argentinos, instaurando el corralón, y entregando Bonos del Estado Nacional (BODEN) a cambio del dinero "atrapado".
Una de las series de esos bonos, es precisamente el BODEN 2012 cuya vigencia llega a su fin.

Respecto de la política de desendeudamiento, el jefe de la cartera de Hacienda recordó que la deuda del sector público con el privado "bajó del 124 por ciento en 2002 al 14 el año pasado".
Esa misma deuda, si se toma en moneda extranjera, "registró una reducción del 92 por ciento en 2002 al 9,6 en 2011", explicó Lorenzino.
El funcionario, además, ponderó la nueva normativa para ordenar las contrataciones y compras públicas, que a su juicio resulta "un nuevo ejemplo de cambio de paradigma".
"Abandonamos el paradigma de la década del noventa y avanzamos en potenciar la capacidad del Estado, gestionando con responsabilidad y encontrando soluciones a los problemas", señaló.
Al respecto, aclaró que esta dirección política "se enmarca en un contexto internacional desfavorable, con países centrales que tienen sus administraciones públicas intervenidas y la única receta es reducir los gastos del Estado".
"Nosotros, en cambio, gracias a la política de desendeudamiento, damos el ejemplo de lo que no queremos que se repita en la Argentina", afirmó.
El ministro también explicó el mensaje del "relojito", ubicado en distintos monitores dentro del Palacio de Hacienda, que marca la cuenta regresiva hacia el viernes de la semana que viene, día en el que se cancelará la última cuota del Boden 2012 por un valor cercano a los 2.300 millones de dólares.
"Ese relojito va más allá del pago de la última cuota del Boden 2012, es la muestra cabal de la política de desendeudamiento del gobierno nacional que nos permite tomar decisiones libremente, sin ningún tipo de condicionamientos", concluyó Lorenzino.

Fuente: INFOnews