Es conocida la fama de «ahorrativos»
que tienen los nativos de Cataluña. Así, un catalán aborda un ómnibus de larga
distancia; a las dos horas de viaje, se levanta y va al baño del micro.
Mientras está haciendo sus menesteres, el chofer del vehículo pierde el
control, y el autobús vuelca en plena ruta. Poco después comienzan a llegar al
lugar del accidente bomberos, policías y miembros de la asistencia médica. Los
socorristas comienzan con su ardua tarea de retirar heridos del ómnibus
colapsado, y uno de ellos les dice:
-Estoy seguro de haber visto a un
hombre entrar al lavabo justo antes del accidente.
Los socorristas intentan abrir la
puerta del baño, pero advierten que está cerrada por dentro. Uno de ellos
golpea la puerta y grita:
-¡Abra, hombre, somos de la Cruz Roja!
Y una voz responde:
-¡Yo ya di! ¡Antes de subir al autobús
yo di!