Un hombre va a la farmacia y revisa
los exhibidores de profilácticos. Con sorpresa, ve que la marca que utiliza
habitualmente tiene una nueva clase: «Condones olímpicos». Obviamente,
divertido con la novedad, compra un paquete. A la noche llega a la casa de su
novia y le dice:
-¡Mi amor, mirá lo que compré:
profilácticos olímpicos!
-¿Y eso qué es, qué tienen de
especial?
-Y, que vienen en tres colores: oro,
plata y bronce.
-Ah... ¿y qué color vas a usar esta
noche conmigo?
Ufano, el hombre responde:
-Mi amor, el dorado, por supuesto...
Y la chica, pensativa, replica:
-Qué lástima; tenía esperanzas de que
usaras el plateado.
-¿Y por qué?
-Y, a ver si alguna vez, y para
variar, terminabas segundo...