Una mujer desconfiaba de la fidelidad de su marido, quien era un
empresario muy importante y viajaba muy a menudo con su secretaria.
Para
sacarse la duda, en la primera oportunidad que su marido viajó, ella contrató
un detective privado para que los siguiera y le informara de todos los
movimientos extraños que ellos hacían.
Sale de viaje el marido con su secretaria y detrás de ellos, el
detective.
Al otro día, recibe un telegrama del detective que decía así :
"NEGOCIO".
La mujer pensaba: -¡¡Este es un boludo !!! ¡¡Ya se que fue a hacer
negocios!!!
Al segundo día, recibe otro telegrama del detective que decía exactamente
lo mismo: "NEGOCIO".
La mujer pensaba: -¿Para qué mierda lo contrate a este boludo??
Estoy
tirando la plata en este gil que no me dice nada nuevo.
Al tercer día llega el marido con la secretaria de su viaje de negocios,
y detrás de ellos llega el detective.
La señora lo agarra del cogote, lo
zamarrea, lo insulta de arriba a abajo y le dice que se niega a pagarle los
honorarios por inútil, ya que ella estaba 99% segura de la infidelidad de su
marido. Cuando el detective logra calmarla, trata de explicarle lo sucedido.
- Señora, Ud. no entiende nada, como todas las mujeres. Yo soy un
detective muy distinguido y como sospecho que su marido la engaña no solamente
con la secretaria, sino también con su mucama, y ante la posibilidad de que
esta última leyera el telegrama, se lo mandé en clave.
Lo único que tenía que
hacer Ud. era leer el telegrama de atrás para adelante para darse cuenta de lo
que estaba pasando ...