Malvinas: Brasil habría apoyado el tráfico de armas hacia Argentina
Según una investigación del diario O Globo de ese país, "se inició un operativo clandestino con dos vuelos diarios para proveer de armamento a la Argentina, montado por la Unión Soviética, negociado por Cuba y con la participación de Brasil, Perú, Libia y Angola”.
Una investigación del diario brasileño O Globo asegura que una semana después del desembarco argentino en Malvinas comenzó a funcionar un puente aéreo montado por la Unión Soviética y Cuba, que contó con el auxilio de Brasil, Perú, Libia y Angola, por el cual llegaba armamento a Buenos Aires.
Brasil apoyó el envío de armas a Argentina.Según narra la investigación, el 9 de abril de 1982 un avión ruso aterrizó en Brasilia y generó una gran sorpresa. La aeronave, preparada para transportar 165.000 kilos de carga y 180 pasajeros, solo llevaba a tres personas a bordo, además de los tripulantes: el diplomático cubano Emilio Aragonés Navarro, su mujer y su nieto. Luego de largas gestiones entre el presidente brasileño José Figueredo y su par de facto argentino, Leopoldo Galtieri. Sin embargo, nunca se supo nada sobre la carga que llevaba.
La misión de Navarro era llegar a la capital argentina en la mañana del sábado 10 para llevar un mensaje de Fidel Castro para Galtieri, en el que anunciaba que “la Unión Soviética se ponía a su disposición y le ofrecía armas y tecnología de informaciones para su lucha contra el Reino Unido para recuperar la soberanía de las Islas Malvinas”, según detalla el periódico.
“De esta manera se inició un operativo clandestino con dos vuelos diarios para proveer de armamento a la Argentina, montado por la Unión Soviética, negociado por Cuba y con la participación de Brasil, Perú, Libia y Angola”, añade.
La investigación también da cuenta de un encuentro entre el entonces secretario de Estado norteamericano, Alexander Haig, con el gobernador del estado de Pernambuco, Marco Maciel, a quien le contó que les aconsejaría negociar a los argentinos, porque serían derrotados por los ingleses con la ayuda norteamericana. Luego, al reunirse con Galtieri, escuchó sobre las “ofertas de ayuda militar de países no occidentales” que había recibido de parte del enviado de Castro.
“Cuando el funcionario estadounidense volvió hacia Londres, un Boeing 707 de Aerolíneas Argentinas aterrizó en Río de Janeiro. Había salido de Tel Aviv, Israel, y su destino era la base aérea de El Palomar, ubicada en las afueras de Buenos Aires. La aeronave argentina fue trasladada para reabastecerse al lado de aviones civiles en el aeropuerto de Galeão, a pesar de contener una carga de bombas y minas terrestres”, describe O Globo.
En el marco del mejoramiento de relaciones entre Brasil y Argentina, Galtieri habría hecho una serie de pedidos, según el periódico, que incluirían “la entrega inmediata de aviones; bombas incendiarias y municiones para fusiles; y sistemas de radar y combustible para aviones, entre otras cosas”.
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